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Viaje a Argentina y Chile por libre

por | 06-02-23 | América, Argentina, Chile, Diarios de viaje

Se podría decir que este viaje a Argentina y Chile por libre fue una especie de capricho. Me explico, estaba deseando ver la zona de la Patagonia tanto de la parte argentina como chilena, sus grandes glaciares, sus grandes picos. Toda esta zona sonaba como magia a mis oídos pucelanos. Así que , en febrero, en pleno verano austral, nos decidimos atacar esta zona a pesar de cruzar el charco para un viaje no excesivamente largo, sólo 12 días útiles, y a pesar del importante desembolso que el viaje suponía, con vuelos internos muy caros y excursiones organizadas también muy caras.

Si ahora me preguntas si el viaje mereció la pena, te contestaré que lo puedes ver por ti mismo cuando leas el blog. ¡Pues claro que mereció la pena!. Naturaleza en estado puro, paisajes increíbles, unos Andes espectaculares, un viaje al fin y al cabo de los que no se olvidan. Comenzamos…

1 .- Mapa con los puntos visitados en el  viaje a Argentina y Chile por libre

A continuación os adjuntamos un mapa para que veáis los sitios que visitamos. Teniendo en cuenta las grandes distancias de estos países, son lugares que están relativamente cerca, salvo Buenos Aires, principio y final de nuestro viaje.

2.-  Itinerario de un viaje a Argentina y Chile por libre

Vamos a repasar lo que hicimos en el viaje día a día, por si vas por allí, puedas tener una guía y una estimación de la duración de la visita.

Día 1: Llegada y visita de Buenos Aires

Salimos el día anterior a las 23 55 con Air Europa y llegamos a Buenos Aires a las 8 30 de la mañana, así que nos pasamos todo el vuelo durmiendo. El aeropuerto de Buenos Aires se encuentra a 36 Km. del centro. Nada mas desembarcar, cambiamos dinero y nos dispusimos a coger el bus al centro, el colectivo como lo llaman ellos. De la terminal B sale el colectivo 8 que te lleva hasta el centro. Puedes consultar los horarios y tarifas del colectivo en la siguiente página. 

Para coger el colectivo tendrás que tener la tarjeta SUBE, que podrás adquirir en kioscos del propio aeropuerto. Te dejo un enlace de la tarjeta para que veas como funciona.

Una vez en el centro nos dirigimos a nuestro hotel, el Claridge, donde dejamos las cosas en la habitación antes de empezar la visita de Buenos Aires.

Comenzamos la visita

Habíamos reservado un hotel en pleno centro de Buenos Aires, así que esto nos iba a venir muy bien para comenzar de manera rápida la visita. Lo primero que visitamos fue la galería Guemes, un pasaje peatonal art nouveau de estilo afrancesado. Muy cerca la catedral metropolitana, azarosa construcción del siglo XVIII y XIX, que posee el mausoleo con los restos del General San Martín.

Viaje a Argentina y Chile por libre

Tras tomar un café en el mítico café Tortoni, pasamos por el espléndido palacio Baroto antes de llegar a la plaza del Congreso, donde además de admirar este magnífico edificio, podemos ver el Km. cero de Argentina, o una réplica del pensador de Rodin entre otras cosas.

Tocaba ahora la visita de monumentos religiosos, como la manzana de las luces, la basílica de San Francisco o el convento de Santo Domingo, todos ejemplos de la herencia española en la ciudad.

Antes de llegar al mercado de San Telmo, visitamos el querido monumento a Mafalda y la escultura del canto al trabajo en la plazoleta Eva Perón.

La Boca y el estadio del Boca Juniors

Nos dirigíamos ahora a una de las zonas más emblemáticas de Buenos Aires: la Boca. Un barrio multicolor que es la cuna del tango. No podía faltar la visita guiada al estadio de la Bombonera, uno de los estadios donde el fútbol se vive con más pasión.

En la zona del puerto vimos el puente Nicolás Avellaneda, una mezcla de puente levadizo y puente transbordador del siglo XX. Finalizamos la jornada en la zona de Puerto Madero, una zona de restaurantes y para pasear junto a la fragata A.R.A. Presidente Sarmiento y el puente de la mujer, diseñado por Calatrava. Hora de comer algo e ir a dormir que al día siguiente madrugábamos.

Día 2: Vuelo a Calafate, traslado a Chaltén y realización trekking  a la laguna de los tres.

Tocaba madrugar, y mucho, ya que el vuelo desde Buenos Aires a Calafate salía a las 4 30. Volamos con Latam Airlines, que como todo el viaje fueron caros y tremendamente impuntuales. Llegamos con retraso sobre las 8 00 previstas, e inmediatamente fuimos al stand de alquiler de coche de National ya que habíamos reservado por internet (también las reservas de coches son extremadamente caras). Teníamos por delante un viaje de 3h 30′ hasta llegar al Chaltén. Por el camino vimos varios ñandúes, un ave como el avestruz pero más pequeña.

Como sólo teníamos un día en el Chaltén, tuvimos que elegir entre todas las rutas posibles, y decidimos hacer el trekking de la laguna de los tres. Empezamos la ruta desde la hostería el Pilar para ahorrarnos una par de horitas sobre la ruta que comienza en el pueblo. Llegamos al mirador del graciar Piedras Blancas y más tarde al campamento Poincenot. Allí preguntamos a excursionistas que bajaban y nos dijeron que no se veía nada arriba, que estaba cubierto.

Pero tuvimos suerte…

Aún así emprendimos lo que nos quedaba que era la parte más dura con un desnivel de 400 metros hasta llegar a la laguna. Cuando llegamos tuvimos suerte porque pudimos contemplar la laguna y el mítico Fitz Roy prácticamente completos. Estuvimos un buen rato allí disfrutando, vimos la cercana laguna sucia, y emprendimos la vuelta a través de la laguna Capri hasta el pueblo. Las dos últimas horas alumbrándonos con la linterna del móvil porque se nos había hecho de noche. Sin embargo había merecido mucho la pena y es un imprescindible en cualquier viaje a Argentina y Chile por libre.

Cenamos algo y nos fuimos directos a nuestro hotel: la hostería lago Viedma.

Día 3: Vuelta a Calafate y visita del glaciar Perito Moreno

Salimos de nuestro hotel del Chaltén y dejamos la localidad con mucho dolor. Sinceramente me hubiera gustado quedarme más tiempo para hacer alguna ruta más, pero no lo teníamos. De camino a Calafate vimos guanacos y un zorro. Paramos en el hotel la Leona, edificio histórico que es patrimonio cultural de la provincia de Santa Cruz, allí desayunamos antes de terminar nuestro viaje a Calafate.

Desde Calafate se tarda 1h 15 minutos en llegar al glaciar Perito Moreno. Cometimos el error de no llenar el depósito en Calafate y no hay gasolineras en todo el trayecto, así que cuando llegamos al glaciar estábamos en reserva. Intentamos conseguir allí gasolina pero fue imposible. A la vuelta unos simpáticos argentinos nos acompañaron por si nos quedábamos sin gasolina, y en ese caso ayudarnos, pero felizmente no hizo falta y llegamos a Calafate.

Actividades en el Perito Moreno

Tras la anécdota que puso un toque de nervios a la visita del glaciar, comentar que allí hicimos dos actividades. Por una parte utilizar las pasarelas existentes para contemplar el glaciar desde diferentes ángulos y por otra parte un viaje en barco que nos aproximó al glaciar.

Descubrimos porque el Perito Moreno tienen tanta fama, impresiona ver sus 60 metros de altura de hielo, e incluso pudimos ver un pequeño desprendimiento. No hace falta que te diga que es algo que tienes que ver en tu viaje a Argentina y Chile por libre.

Regresamos a Calafate, dejamos el coche de alquiler y nos comimos un buen asado antes de ir al Albergue lago argentino donde dormiríamos.

Día 4: Visita glaciares Upsala y Spegazzini. Traslado a Puerto Natales (Chile)

La visita a los glaciares Upsala y Spegazzini sólo puede efectuarse a través de un tour organizado, y como os podéis imaginar, barato no es. Nos vinieron a recoger al hotel a las 7 00 de la mañana y recorrimos los 40 Km. de distancia que nos separaban de Puerto Bandera, punto de partida de los barcos para ver los glaciares.

La navegación se produce en el lago argentino y llega un momento que discurrimos por numerosos icebergs de un color azulado inigualable. Divisamos ya el glaciar Upsala con 13 Km. de anchura. Posteriormente nos desplazamos al brazo del glaciar Spegazzini con un espesor en su frente de hasta 125 m., siendo el más alto del parque nacional.

El regreso se produjo en torno a las 15 30. En ese momento tomamos el bus con la compañía Bus Sur hasta Puerto Natales. Tendrás que tener cuidado porque ahora la excursión acaba en  torno a las 17 00 y no te permite coger el bus. Sobre las 21 30 llegamos a Puerto Natales, cenamos y nos dirigimos a nuestro hotel en la ciudad: el Hostal Chorrillos.

Día 5:  Excursión a los glaciares Balmaceda y Serrano. Paseo por Puerto Natales

Nos dirigimos al puerto de Puerto Natales ya que a las 7 30 empezaba nuestra navegación en catamarán por los fiordos magallánicos. Recorrimos el canal Señoret donde pudimos ver leones marinos y colonias de cormoranes. Algunas cascadas nos acompañaron en el viaje, así como el suave planear del cóndor sobre nuestras cabezas.

Llegamos así al glaciar Balmaceda, que nos espera orgulloso con su enorme colada de hielo. Tras la visita paramos en el parque Nacional Bernardo O’Higgins donde realizamos una breve caminata hasta el mirador del glaciar Serrano. En el camino estuvimos acompañados de bosques de cohiúes, nirres y ciruelillos.

Tras el esfuerzo llega el momento de degustar un whisky con hielo milenario del glaciar. Después realizamos una parada en estancia Perales donde nos dieron un asado patagónico. A eso de las 17 30 llegamos de vuelta a Puerto Natales y aprovechamos para conocer un poco la localidad.

La parroquia de María Auxiliadora, la plaza de armas, los muelles, el monumento de las manos, el monumento al Milodón y el monumento al viento, fueron nuestros puntos de visita. Aunque lo que más nos llamó la atención fueron sus divertidas papeleras .

Día 6: Trekking base Torres del Paine

En la oficina de Europcar de la calle Manuel Bulnes recogimos a las 9 00 de la mañana el coche reservado online. Previamente habíamos desayunado. Tras la recogida del vehículo nos dirigimos al Parque Nacional de Torres del Paine, sin duda un imprescindible en cualquier viaje a Argentina y Chile por libre.

Condujimos hasta el Torres del Paine Welcome Center casi dos horas, entrando por el sector de portería Amarga. Allí puedes obtener información del trekking y aparcar el coche. Comenzamos nuestro trekking a la base de Torres  del Paine, un sendero de unas 8 horas y de 20 Km. de distancia, con un desnivel de cerca de 1.000 metros.

Primeramente subimos el valle del río Ascencio hasta llegar al refugio chileno. Desde allí empezó la parte más difícil con un desnivel de 300 m. trepando entre las rocas. Cuando se llega al lago la visión de las Torres del Paine es sencillamente una de las cosas más espectaculares que he visto en mi vida viajera.

La bajada la hicimos por el mismo camino. Recogimos el coche y nos dirigimos al alojamiento que habíamos reservado en el parque: la hostería lago Toro. De camino paramos en el espléndido mirador de los cuernos y en el mirador del salto grande. Hora de descansar que mañana nos esperaba otro día duro.

Día 7: Segundo día Torres del Paine. Barco al glaciar Grey.

Nos levantamos muy temprano, de tal forma que cuando pasamos por el acceso Serrano al parque todavía no había nadie en él. En el camino paramos a hacer una foto a una rapaz que comía el corazón de un conejo recientemente atropellado. Empezábamos el día con imágenes impactantes.

Nos dirigimos al hotel lago Grey, punto de partida para ver el glaciar del mismo nombre. Partíamos a las  9 00 h., aunque el check in lo tuvimos que hacer una hora antes.  Navegamos en un viaje de ida y vuelta a través de varios icebergs y varios kayaks que intentaban acercarse también al glaciar.

El frente del glaciar es magnífico, con un color azul claro muy intenso. Después de unas 3 horas llegamos al punto de partida de nuevo.

Desde allí nos dirigimos a las estupendas vistas que hay en el puente de acceso  a la hostería Pehoe, y posteriormente hicimos el pequeño sendero hasta el mirador cóndor, con unas espléndidas vistas de las montañas. En el trayecto guanacos, aves rapaces y zorros nos hicieron compañía.

Volvimos a nuestro alojamiento del hostal Chorrillos en Puerto Natales, no sin antes dejar el coche a las 22 00. Mañana tocaba madrugar para hacer un nuevo desplazamiento.

Día 8: Llegada a Chiloé

A primerísima hora tomamos el bus-sur desde Puerto Natales a Punta Arenas. Tardamos más de 3 horas y antes de las 10 00 estábamos en  nuestro destino. Desde Punta arenas cogimos un vuelo con Sky Airline que a las 14 10 nos dejó en Puerto Montt, puerta de entrada de Chiloé. A  las 14 30 cogimos el coche reservado en el aeropuerto de la compañía Rosselot, y nos pusimos en marcha dirección Chiloé.

Para llegar a la isla teníamos que tomar el transbordador, como lo llaman en Chile. Estaba claro que el día, con tanto transporte, no iba a ser muy productivo. Una vez que llegamos a Chiloé, fuimos directos al monumento natural de los islotes de Puñihuil, donde conviven pingüinos magallánicos y de Humboldt. Sin embargo llegamos muy tarde y ya no había tours, así que sólo pudimos disfrutar de la playa.

Las iglesias de madera de Chiloé están consideradas Patrimonio de la Humanidad. La  primera que visitamos fue la blanca iglesia del pueblo de Dalcahue. Desde allí nos trasladamos a Castro donde teníamos nuestro hotel sobre uno de sus característicos palafitos: el palafito Waiven Castro Chile.

Día 9: Segundo día en Chiloé. Iglesias y parques nacionales.

Nos despertamos en nuestro hotel palafito en Castro, que nos recibió con una intensa lluvia. Visitamos la zona de palafitos y fuimos al mirador Gamboa, desde donde se ven estupendamente.

Posteriormente visitamos la iglesia amarilla de madera de la localidad y un poco más adelante los palafitos de Pedro Montt y todos los que se encuentran en el río de la Chacra.

Nuestros siguiente destino fueron las iglesias de madera de Nercón, Vilipulli y Chonchi, todas de las mismas características que las visitadas anteriormente.

Desde allí visitamos el Parque Nacional de Chiloé, en concreto el sendero del Tepual. Este sendero discurre por bosque valdiviano entre coihúes, copihúes y tepúes. También nos acercamos hasta la playa, con un viento infernal por cierto.

Regresamos a Puerto Montt y dejamos el coche a las 21 00. Desde allí nos desplazamos a la localidad de Puerto Varas donde nos esperaba nuestro alojamiento: Sweet Home BB Puerto Varas.

Día 10: Paso andino. De Chile a Argentina de nuevo.

Hoy tocaba hacer el cruce andino, un trayecto desde Puerto Varas en Chile a Bariloche en Argentina, y que sólo se puede hacer de manera organizada, no en vehículo propio.

Salimos de Puerto Varas pronto por la mañana, bordeando en bus el lago Llanquihue hasta llegar a Petrohué. Allí visitamos los famosos saltos, pero sin embargo no pudimos ver los volcanes Osorno y Cabulco porque estaba nublado.  Desde Petrohué tomamos un barco y navegando por el lago de Todos lo Santos llegamos hasta Peulla.

Cruce de la frontera

Desde Peulla situada en el parque nacional Vicente Pérez Rosales, tomamos un bus con dirección a Puerto Frías, ya en Argentina. Cruzamos la frontera y entramos en el parque nacional Nahuel Huapi. Desde Puerto Frías navegamos por el lago Frías hasta Puerto Alegre, y desde allí un bus nos llevó hasta Puerto Blest.

Desde Puerto Blest hicimos la última navegación por el lago Nahuel Huapi hasta Puerto Pañuelo. Punto desde el cual cogimos el último bus que nos llevó a Bariloche.

Tres navegaciones y cuatro buses después, habíamos llegado a nuestro destino final tras un viaje de 12 horas. Una pena que la lluvia que nos acompañó todo el viaje no nos permitió apreciar en todo su esplendor los paisajes, porque realmente es un imperdible en cualquier viaje a Argentina y Chile por libre. Cenamos en Bariloche y fuimos a dormir a nuestro hotel: hostería Guemes.

Día 11: Visita de Bariloche y regreso a Buenos Aires

San Carlos de Bariloche está considerada la capital de la aventura y principal centro de esquí en Argentina, además de ser la ciudad más visitada y poblada de la Patagonia. Nuestra permanencia en la ciudad no fue larga, así que nos dedicamos a hacer el llamado circuito chico, un recorrido en coche de 60 Km. de distancia, en el que la ciudad, los lagos, los bosques y las montañas se unifican. El primer punto que visitamos es el cerro campanario, al cual hay que subir en telesilla. Desde arriba tenemos unas de las mejores panorámicas de Argentina, además de poder disfrutar de su confitería.

Después visitamos el hotel Llao Llao y la capilla de Eduardo y sus espléndidos alrededores donde disfrutamos de unos cuantos paseos. Puerto Pañuelo, puerto donde llegamos el día anterior entre la lluvia, el sendero de los arrayanes, Bahía López y su playa y el puente  Arroyo la angostura fueron nuestros próximos destinos en la carretera. Un poco más adelante un punto panorámico es un excelente mirador sobre la zona del hotel Llao Llao.

A continuación nos desviamos a la colonia suiza, el primer asentamiento europeo en la región y que guarda su sabor del siglo XIX con numerosos restaurantes y tiendas de recuerdos.  Ya en Bariloche, y antes que saliera el avión a Buenos Aires, visitamos la catedral Nuestra Señora del Nahuel Huapi y la plaza del Ayuntamiento con sus edificios del norte de Europa.

A las 14 00 salía nuestro vuelo que nos dejó un par de horas después en la capital. Allí dejamos las mochilas en el NH City Buenos Aires y nos fuimos a cenar. Al día siguiente remataríamos lo que nos quedaba de Buenos Aires antes de finalizar el viaje.

Día 12: Visita de Buenos Aires antes de partir hacia España

Después de desayunar visitamos el famoso obelisco de 67,5 metros situado en la Avenida 9 de julio, y construido con motivo de la fundación de Buenos aires por Pedro de Mendoza.  Desde allí, y tras pasar la torre monumental y la estación Retiro,  nos dirigimos al parque de las Naciones Unidas donde vimos el Floraris Genérica, una flor de acero inoxidable que abre y cierra sus pétalos dependiendo de la hora del día. Cerca podemos apreciar preciosos edificios como la Facultad de Derecho o el Museo Nacional de Bellas Artes.

No podía faltar en cualquier viaje a Argentina y Chile por libre, una visita al cementerio de la Recoleta para ver entre otros el mausoleo de Eva Perón, símbolo del país.

Ya de vuelta al hotel para recoger las mochilas, pasamos por la zona de teatros y vimos la espléndida fachada del teatro Colón, así como los murales de la cúpula de las galerías Pacífico. Cogimos el bus desde el centro al aeropuerto y a las 13 45 salió nuestro avión, llegando a España a las 5 25 de la mañana del día siguiente. La cabezadita en el avión fue fundamental porque ese mismo día tocaba trabajar…

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PUCELANO POR EL MUNDO

Soy Juan Ángel Valdunquillo, ingeniero industrial por profesión, historiador del arte por devoción y apasionado de los viajes. Agradezco la inestimable colaboración de @rebeldeviajero con sus fantásticos dibujos y su compañía viajera.

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